Renovar el baño puede ser emocionante… o una pesadilla. Muchas veces, por apurarse o no tener toda la info, se cometen errores que después salen caros o arruinan el resultado final. Para que no te pase, te dejamos esta guía con los errores más comunes al reformar un baño y cómo podés evitarlos:
Parece obvio, pero pasa más seguido de lo que creés. Si no medís correctamente el lugar donde va el vanitory, podés terminar con un mueble que no entra bien, que tapa la puerta o que no deja espacio para moverte cómodo.
💡 Tip: Medí ancho, alto y profundidad. Tené en cuenta también el espacio que ocupan los cajones o puertas al abrirse.
Sí, el diseño es clave… pero si el mueble no es funcional, te vas a arrepentir todos los días. Muchos eligen vanitorys hermosos que después no tienen espacio para guardar nada o son incómodos de usar.
💡 Tip: Buscá un equilibrio entre diseño y funcionalidad. Pensá en cómo usás tu baño en el día a día.
El baño es un ambiente húmedo, y no todos los materiales se la bancan. Si elegís un mueble de mala calidad o sin protección adecuada, se va a hinchar, manchar o arruinar en poco tiempo.
💡 Tip: Optá por materiales resistentes a la humedad como el MDF laqueado. Asegurate de que tenga buenos acabados y sellados.
A veces se elige un vanitory moderno para un baño clásico (o al revés), y el resultado no termina de cerrar. Todo tiene que tener coherencia visual.
💡 Tip: Definí el estilo que querés: ¿moderno, rústico, minimalista? Elegí el mueble en base a eso y combiná con grifería, revestimientos y espejo.
Un error común es subestimar cuánto necesitás guardar en el baño. Después, los productos terminan todos a la vista, generando desorden.
💡 Tip: Elegí modelos con cajones amplios y divisiones útiles. Si el baño es chico, los muebles flotantes con buen guardado son clave.
Hay muebles que necesitan una pared resistente o conexiones específicas. Si no tenés esto en cuenta, podés llevarte una sorpresa (y un gasto extra) al momento de instalar.
💡 Tip: Antes de comprar, revisá qué tipo de instalación requiere el mueble y si tu baño está preparado.
A veces, por querer gastar menos, se elige lo más barato. Pero lo barato sale caro. Un vanitory de baja calidad se rompe rápido, se ve mal y te obliga a cambiarlo antes de tiempo.
💡 Tip: Invertí en calidad. Un buen mueble te dura años y mejora la experiencia de uso todos los días.
Elegí fabricantes que ofrezcan garantía y tengan buenas referencias. Eso te asegura calidad y te da tranquilidad ante cualquier problema.
Renovar el baño no tiene por qué ser un dolor de cabeza. Si evitás estos errores y elegís con criterio, podés transformar tu baño en un espacio funcional, lindo y duradero.
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